Cartografías nació en Río Cuarto en 2004 como una revista de crítica. Mapas de un territorio imaginario, el subtítulo de la publicación, resumía sus intenciones primigenias: principalmente, la de cartografiar los zonas estables y, al mismo tiempo, poco exploradas de la producción literaria local. Si, a diferencia de las demarcaciones topográficas, la literatura instaura una geografía alternativa y posible, la crítica, por su parte, trata de recorrer su espacio conjetural postulando interpretaciones también provisorias. Salieron tres números, respectivamente dedicados a las obras de Juan Floriani, Gerardo Mastrángelo y Antonio Tello.
Una de las secciones del primer número de la revista se ocupó de difundir las propuestas narrativas y poéticas más recientes mediante un par de sucintas antologías. A partir de estas compilaciones breves cobró fuerza el proyecto editorial que aún sigue vigente. Entonces, a mediados de 2005, se publicaron los dos primeros libros de una colección de bolsillo que reúne, hasta la fecha dieciocho títulos, nueve de narrativa y nueve de poesía. Al año siguiente, se lanzó Archipiélago, la colección de poesía, a la que se agregaron luego las otras dos, Tusi-tala (narrativa) y Radiografías (ensayos). Considerando las cuatro colecciones se llevan editados cuarenta y tres títulos.
Así, el proyecto editorial originario, concebido para promover las escrituras de poetas y narradores del medio, amplió sus fronteras incluyendo autoras y autores que residen en diferentes ciudades de la provincia de Córdoba, de la Argentina e incluso de España.
No obstante estas mutaciones (deliberadas, pero también azarosas), Cartografías conserva su fisonomía inicial, la de consolidarse como una editorial independiente que funciona al modo de una cooperativa integrada por escritores y escritoras. Su independencia radica, sobre todo, en que la elección del material editado responde a consideraciones artístico-literarias. Más que imponer una tendencia, impulsar una moda, seguir las exigencias de un gusto establecido, responder a los rasgos de una supuesta idiosincrasia localista o a las demandas difusas del mercado, Cartografías apuesta por la literatura, por su pluralidad, divergencia y polimorfismo.
Lxs lectorxs pueden comprobarlo acercándose a sus libros.