«El forastero nació como una necesidad de expresarme de una manera nueva, descontracturada; es mi grito de la medianía de la vida», dice Víctor Maldonado al hablar de su primer libro publicado.
Tal como se señala en la contratapa, «El forastero es un libro misceláneo. El cuento, la poesía y la meditación se dan cita en una polifonía más que singular. No obstante, una cosmovisión de sesgo latinoamericano cohesiona la variedad de géneros que recorren de principio a fin».
En esta entrevista repasa sus primeros acercamientos a la lectura y la escritura y recuerda sus primeras creaciones vinculadas a las historietas. «Escribir es connatural a mi, no puedo explicarlo de otra manera».
-¿Cuál es tu recuerdo de cuando empezaste a leer?
-No tengo un recuerdo claro de cuándo comencé a leer; de hecho, desde mi punto de vista, la lectura es un hecho simultáneo con la conciencia de vivir (hay patio grande en un día cálido, y un cielo azul y una paloma que lo cruza allá en lo alto; luego, voy a ver a mi madre, porque de alguna manera sé que está trabajando en el local que da a la calle, y allí siempre hay revistas para hojear). Y es que aún antes de leer un libro, ya deletreo algunas palabras.
-¿Qué fue lo primero que escribiste y por qué tuviste ese impulso?
-Mis primeros escritos tenían el formato de historietas. Creaba historias, hacía los dibujos, les agregaba los diálogos. En esa época la presencia de historietas era todavía fuerte. Un buen día, allá por 1983, escribí un cuento que presenté en una reunión de la Sade (Sociedad Argentina de Escritores). No recuerdo de qué trataba, pero sí que no fue bien recibido por un miembro del grupo. Así que me asusté y no volví más.
Lo que me llevó a escribir historietas y cuentos (pese al susto, nunca paré de escribir) es un impulso que siento en el pecho, algo cálido y urgente que aparece en mi seno hasta el día de hoy. Escribir -y todo lo que implica- es connatural a mi ser, no puedo explicarlo de otra manera
-¿Cómo se fue gestando El forastero?
–El Forastero nació como una necesidad de expresarme de una manera nueva, descontracturada. Por eso consta de dos partes, y esas partes de cuentos y poesías y reflexiones. Hubo una urgencia de expresión libre, cuasi juvenil, de congregar escritos sueltos «viejos», nuevos y alguno que otro escrito al efecto. El Forastero es mi grito de la medianía de la vida.
-¿Qué lugar tiene el género de ciencia ficción en tu vida y en tu obra?
-El género de ciencia ficción ocupa un lugar muy importante en mi vida. De él me nutro, como antaño, no sólo por lecturas, sino también con buen cine (Bladerunner, 2001 Odisea del espacio, Horror en el espacio, etc.) Y la música (Kraftwerk, Vangelis, Jarré). La C.F. es prospectiva trabajada en el hoy, el bocadillo que se saborea antes de ser comido, la manera de anticiparse o resignarse a lo que vendrá.
-¿Qué significa publicar, formar parte del catálogo de una editorial independiente?
-Publicar en una editorial independiente es un paso importante en la vida de un escritor, es sentirse de alguna manera hermanado con los que forman parte de ella y sufren las vicisitudes del mercado y de la era de la imagen. Es sentirse un poco menos solo, mientras el alma discurre hacia ese futuro posible (terrible, quizá, por su carácter contingente) que la ciencia ficción bien sabe anticipar.