A veces, otra vida
Las historias que nos cuenta Nato ocurren acá a la vuelta, en las cercanías, en el planisferio donde se mueven sus pasos y sus afectos. Ocurrieron antes, están sucediendo, ocurrirán. Nos cuenta con los pies en la tierra, lo que sus ojos han visto, lo que su mente crea, sin entrar en el mundo fantástico, no aparecen seres extraños sino cadáveres en un tanque, paraísos perdidos, grietas o barrancos inexplicables. Es una mirada profunda, no es indiferente a su entorno. No juzga, cuenta. Mejor, muestra, nos lleva con su prosa limpia, sin rebusques, rica en imágenes y referencias, nos hace cómplices de un narrador que siempre está en la historia que, como Nato, es un testigo privilegiado de su tiempo, este tiempo que al momento de escribir esta reseña está en ascuas, pero la vida continúa, a pesar de todo (…)
Rubén Padula